Victoria con tres torres y media

Las horas de la mañana. Esta sesión se dividió en dos, una la tarde del martes trece y otra la mañana del miércoles catorce. La última hora del día y la primera. Me gusta la limpieza de la mañana, los azules que da. Yo haciendo el gusano en el suelo con un 24 para intentar que se viera algo más que lo que suelo sacar. Victoria, angelical con la falda evasé que se hizo (demasiado) amiga del viento.

 

Lurkers

Made bailando en la Plaza Mayor de Madrid. Siempre congregamos cierta cantidad de público, que nunca acaba de molestarme. Forma parte de la idea del proyecto. No es una bailarina en un escenario sino una bailarina en la calle. La danza va con la persona, siempre, no algún día alguna hora, está contigo cuando paseas, cuando vives. Al rededor, por supuesto, siempre hay gente, que a veces, te mira.